La Junta de Castilla y León ha declarado riesgo de incendio por causas meteorológicas los días 30 y 31 de julio, y alerta el 31 de agosto en toda la comunidad.
Esta medida implica, entre otras, la prohibición del uso de barbacoas, maquinaria en el monte, pide extremar la precaución y comunicar inmediatamente al 112 la existencia de posibles incendios.
El texto completo de la resolución puede consultarse aquí