Mañana de voluntariado en la zona recreativa del Bao.
Un año más, como ya viene siendo costumbre llegado el verano, la Casa del Parque ha llevado a cabo el jueves 5 de agosto,, una jornada de voluntariado ambiental en nuestra localidad.
En esta ocasión, variando un poco el escenario de anteriores convocatorias, se ha elegido la zona recreativa del Bao, en lugar del habitual recinto del Jardín botánico..
Dio comienzo la jornada a las 9 de la mañana con la recogida de datos de los participantes, en la plaza de la localidad, para a continuación, acometer a pie por el GR-10, el tramo de la ruta, para llegar sobre las 11 al merendero del Bao.
Durante el trayecto, la docena de jovencísimos participantes, acompañados por seis adultos, gozaron la oportunidad de contemplar la rica variedad de especies vegetales autóctonas que jalonan el antiguo camino de herradura utilizado por la gentes de Monsagro para acceder a las huertas del Carrascal y el Bao.
Entre las más significativas, sin duda, destacar: la encina (Quercus ilex), el roble (Quercus robur), el fresno (Fraxinus excelsior), el aliso (Alnus glutinosa) y el castaño (Castanea sativa) – como curiosidad añadida, citar que pese a que estos más que bicentenarios castaños ocupan suelo público, en épocas pasadas tenían dueño, dichos dueños se encargaban tanto del mantenimiento del árbol como de la recolección del fruto – y en lo tocante a la parte arbustiva, el abundantísimo brezo (Erica australis) y la jara común o pringosa (Cister ladanifer).
El GR transcurre en paralelo al cauce del rio Agadón, a escaso metros de su margen izquierda, sustentado por por antiguos muros de piedra seca, que a pesar del paso del tiempo y del escaso o nulo mantenimiento actual, se siguen manteniendo incólumes, poniendo de manifiesto, que las cosas que se hacen bien perduran en optimas condiciones.
El paseo como tal, se basta y se sobra como para haberse constituido en la actividad principal del voluntariado del presente año. A la ya citada contemplación de las distintas variedades, cabe sumar la rusticidad de la senda y el inigualable paisaje, amén, de los dos puentes antiguos el del Olla y el de Peralías, con el añadido de la fuente el Sapo, los grabados pastoriles y los riscos del Paso Malo. pero lejos de eso, la que podríamos denominar actividad central, se desarrolló una vez llegados a la zona recreativa del Bao.
El monitor Pablo, sumó a las explicaciones ofrecidas durante el recorrido, un exhaustivo repaso por las distintas especies de aves insectívoras que pueblan el Parque Natural de las Batuecas-Sierra de Francia, del cual Monsagro forma parte destacad aportando la totalidad de la extensión de su territorio desde su acta fundacional.
Como colofón, colocación de casetas nido con el compromiso de realizar un seguimiento en años sucesivos.
Rematada la actividad, el Ayuntamiento tuvo a bien obsequiar a los participantes con un pequeño ágape a base de empanadas y fruta, culminando de forma tan nutritiva la mañana de voluntariado ambiental de este atípico año 2021, aún con la amenaza de la COVID-19 planeando sobre nuestras cabezas, motivo por el cual – tal y como puede apreciarse en las fotografías adjuntas – las mascarillas fueron, sin lugar a dudas, invitadas obligatorias.